Ejemplo OKR aplicado a niños

Ejemplo. Los OKR se pueden aplicar a la esfera privada con niños.

Veamos un ejemplo:

Se trata de una madre preocupada por el aprovechamiento del tiempo libre de sus hijos en verano.

Esta madre conoce las ventajas de los OKR y establece 3 reuniones:

En la primera pregunta por los objetivos a sus hijos

En la segunda, les ayuda a definir los objetivos a cada hijo y los hace públicos para toda la familia

En la tercera, define los indicadores de logro y los objetivos alineados a lo que quiere la madre

En la cuarta, la madre les comenta sus expectativas y los motiva

En la quinta, la madre les anima y motiva a luchar por los objetivos

 

Primera Reunión: El objetivo de verano

Termina el verano: ¿Qué vais hacer?

Cuando acabó el curso les pregunté a mis hijos de 7 y 10 años qué iban a hacer durante el verano para no perder el hábito de trabajo.

  • Leer, me dijo Yago. Escribir cuentos, me dijo Clara.

¡No me vale, les dijo la madre. 

  • Me decís que este verano vais a leer y escribir.

Pero si cuando llegue septiembre habéis leído 10 páginas y escrito media cuartilla, yo no podré deciros que no habéis cumplido con vuestra palabra. Al fin y al cabo, habréis leído y habréis escrito, ¿cierto?

  • Cierto, contestaron.

Y sin embargo, leyendo 10 páginas o escribiendo media cuartilla, no conseguís que se cumpla lo que yo busco, es decir, que no perdáis el hábito de trabajo.

Segunda reunión: un poco de ayuda

OKR del verano mejorados y públicos

Esta es la segunda versión de sus objetivos para este verano después de unos minutos de reflexión:

  • Clara: escribir un comic mudo relacionado con el interior del cuerpo humano
  • Yago: leer Juegos del Hambre o Juego de Tronos.

Los objetivos deben ser públicos y accesibles en todo momento por todo el equipo, por eso opté por el frigo 😉

Y ahora, comparto el primer OKR de dos niños de 7 y 10 años, después de una primera versión cuyos objetivos eran ambiguos y faltos de compromiso y una negociación posterior en la que propuse a Yago que cambiara a la intrépida Katniss Everdeen por el tierno Harry Potter.

Reflexión de la líder

Objetivo de la líder: la madre

Mi OKR: que mis hijos obtengan el hábito de trabajo

Mi objetivo: quiero que Yago y Clara mantengan el hábito de trabajo durante el verano

Key Result

  • Que trabajen al menos 30 minutos al día

Sus objetivos:

Yago – Voy a leer todos los libros de Harry Potter

Clara – Voy a escribir un cómic sobre el cuerpo humano

Key Results

  • Yago – Leer al menos 30 páginas al día
  • Clara – Escribir al menos 1 página a la semana

Este ejemplo a pesar de su sencillez desentraña algunas de las claves de OKR y desvela alguno de sus superpoderes.

Recordar la teoría

Pero antes de continuar, un repaso ¿Qué es OKR?

Es el resultado natural detrás de una filosofía de trabajo. Es un modo de concebir, crear y hacer crecer proyectos y compañías que precisa una extremada claridad de visión y ayuda a conseguirla, alineando a los equipos en torno a la consecución de los objetivos que realmente importan.

OKR es toda una declaración de intenciones que proporciona foco, alineación de equipos, transparencia de gestión, y liderazgo al más alto nivel.

Conceptos clave en OKR

Y ahora desvelemos algunas de las claves de OKR:

  • Objetivo. Es aquello que quieres conseguir.

Tercera Reunión: ¿qué vamos a medir?

OKR concretos con métricas

Decir que vas a leer o escribir es un objetivo tan ambiguo que en realidad no compromete a nada. Leer los libros de Harry Potter despachando 30 páginas por día, es un objetivo concreto con una medida del éxito muy clara.

  • Resultados claves son los indicadores que miden el éxito en la consecución del objetivo.

Si los niños trabajan 30 minutos al día, yo sé que no perderán el hábito de trabajo. Si Yago lee 30 páginas diarias, acabará leyendo los libros de Harry Potter. Si Clara escribe 1 página a la semana, conseguirá escribir su cómic.

  • Los objetivos de los equipos (mis hijos), deben estar alineados con los objetivos de compañía (los míos).

Los equipos no pueden construir sus objetivos si no conocen el objetivo de la compañía. Una vez conocido deberán decidir cómo van a contribuir a su consecución.

Por tanto, OKR es un proceso:

  • “Top-down” en un principio, cuando se definen y comparten los objetivos de compañía:

“Quiero que mantengáis el hábito de trabajo durante el verano”

  • “Bottom-up” en segunda fase, cuando los equipos definen sus propios objetivos alineados con los primeros:

“Voy a leer Juegos del Hambre y escribir un cómic del cuerpo humano”

  • y en tercera fase, se abre un espacio intermedio de negociación donde se consensua el resultado final:

“Harry Potter en lugar de Katniss”.

Este punto merece capítulo aparte, que además se complica con los objetivos transversales. Es importante evitar que una excesiva alineación y verticalidad en el proceso, genere silos incomunicados dentro de la compañía.

Cuarta Reunión: la motivación que les da la madre

La madre y los superpoderes

Reflexionaré sobre los superpoderes de OKR en otro momento, por ahora comparto uno de mis favoritos porque supone además una diferencia importante con otros modelos de management por objetivos:

  • OKR es aspiracional y nos incita a pensar en grande.

Es muy posible que Yago no lea los 7 libros de Harry Potter en un verano, pero la definición de su objetivo es perfecta. Estoy convencida de que leerá más que si se hubiese propuesto leer sólo los 2 primeros tomos.

Es por eso tan importante saber que nadie debe ser castigado si no llega a su objetivo ni premiado si lo consigue. 

Si queremos dentro de nuestras organizaciones personas que se marquen grandes retos y luchen por conseguirlos, no los castiguemos si no tocan el cielo o la próxima vez apuntarán mucho más bajo.

Quinta Reunión

Reunión de retrospectiva de Yago y Clara

 

Fuentes:

Ruth Puente 1º parte